La educación superior ha cambiado sustancialmente en las últimas décadas. La pedagogía tradicional de entrega de conocimientos, basada en una relación unidireccional entre profesores y estudiantes, está completamente agotada. Se requiere que quienes participen en procesos formativos lo hagan adecuando sus prácticas y tratando de hacer más significativos y pertinentes los contenidos entregados y las formas en que éstos llegan a los estudiantes. En el caso de la pedagogía y la formación en administración y políticas públicas, esto se hace aún más necesario debido a los múltiples cambios que, tanto el Estado como su administración pública, han vivido en los últimos treinta años. Innovar en el aula ya no es solo una necesidad, sino también una obligación para nuestros profesores, para poder así preparar a profesionales no solo con dominio y manejo teórico de excelencia, sino también con un alto compromiso ético. Este libro busca compartir con la comunidad experiencias e ideas innovadoras en el ámbito de la docencia, no solo para reconocer el esfuerzo de muchos formadores de la región, sino también para estimular a otros a sumarse al desafío de hacer una mejor docencia, y así formar a gestores públicos más preparados y comprometidos con las necesidades de nuestros pueblos.
